La Confederación Nacional Campesina (CNC) acusó al gobierno de Felipe Calderón de “la hambruna que se presenta en regiones indígenas y rurales del país, misma que amenaza con extenderse por el veto presidencial al decreto legislativo que dispone la aplicación de 10 mil millones de pesos en ayuda a los habitantes de 22 estados de la República afectados por la sequía”.
Gerardo Sánchez García, líder de la CNC, condenó la actitud presidencial al vetar el decreto legislativo en apoyo a los damnificados por el cambio climático en 22 entidades federativas que sufrieron los estragos en 2011, bajo el argumento de que “se actuaría de manera irresponsable para sacarse de la manga esa cantidad de dinero”.
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